CONTINUACION DE LA SESION ORDINARIA NUMERO UNO DE LA HONORABLE ASAMBLEA NACIONAL, CORRESPONDIENTE AL DIA TRECE DE MARZO DEL 2001, CON CITA PARA LAS NUEVE DE LA MAÑANA. (DECIMOSEPTIMA LEGISLATURA). PRESIDENTE OSCAR MONCADA REYES: Se suplica a los señores Diputados que están en las diferentes Comisiones, que por favor tomen sus asientos que ya vamos a iniciar la Sesión. SECRETARIO PEDRO JOAQUIN RIOS CASTELLON: JOSE RENE ARAUZ LOPEZ BAYARDO ARCE CASTAÑO NELSON ARTOLA ESCOBAR ARNULFO CONSTANTINO BARRANTES MORAZAN MARIA LOURDES BOLAÑOS ORTEGA RAFAEL OMAR CABEZAS LACAYO EDUARDO BERNARDO CALLEJAS DESHON MIGUEL ANGEL CASCO GONZALEZ ROGER CASTELLON ORUE ANGELES CASTELLON CASTRO FELIX HERNAN CASTILLO FLORES EDWIN CASTRO RIVERA LEONIDAS NICOLAS CENTENO RIVERA ALVARO IVAN ESCOBAR FORNOS JOSE MANUEL ESPINOZA CANTILLANO STEADMAN FAGOT MULLER RITA DEL SOCORRO FLETES ZAMORA FRANCISCO HERIBERTO GADEA MANTILLA CARLOS SALOMON GARCIA BONILLA SERGIO DE JESUS GARCIA PINELL ERNESTO MARCELINO GARCIA QUIROZ JOSE MERCEDES GONZALEZ PICADO WALMARO ANTONIO GUTIERREZ MERCADO SALVADOR HERNANDEZ GUILLEN FANOR ANTONIO HERRERA PEREZ CARLOS ANTONIO HURTADO CABRERA ALBERTO FRANCISCO JARQUIN SAENZ REINALDO LAGUNA MAIRENA ARIEL LOPEZ LOPEZ AUGUSTO CESAR LOPEZ GONZALEZ FRANCISCO JOSE MARTINEZ LARIOS PEDRO ALEJANDRO MATUS GONZALEZ WILLIAM MEJIA FERRETI ENRIQUE MEMBREÑO ORTEGA JOSE DE JESUS MIRANDA HERNANDEZ VICTOR MANUEL MIRANDA VARGAS OSCAR MONCADA REYES CARLOS WILFREDO NAVARRO MOREIRA RAMON ELISEO NUÑEZ HERNANDEZ GUILLERMO ANTONIO OSORNO MOLINA LEONEL PANTIN WILSON NOEL ORLANDO PEREIRA MAJANO GUILLERMO RAMON RAMIREZ CUADRA GUILLERMO VIRGILIO RAMOS DUARTE PEDRO JOAQUIN RIOS CASTELLON ANGELA DEL ROSARIO RIOS PEREZ ALBERTO FRANCISCO RIVERA MONZON EDUARDO JOSE RIZO LOPEZ MAXIMINO RODRIGUEZ MARTINEZ MANUEL ERNESTO ROMERO ANGULO ANABEL ROMERO LOPEZ GUADALUPE DOLORES SANCHEZ BLANDON NATHAN JORGE SEVILLA GOMEZ PABLO DEL SOCORRO SIERRA CHACON WINSTON SIMPSON GAYLE LUIS ALBERTO URBINA NOGUERA HENRY URCUYO MALEAÑOS SAUL ZAMORA DICARIO DORA ODILI ZELEDON ZELEDON LEONIDAS ZUNIGA MOLINA 60 Diputados presentes. Hay quórum legal. PRESIDENTE OSCAR MONCADA REYES: Se abre la Sesión. Señores Diputados: Tenemos el honor de recibir aquí en el Plenario de la Asamblea, de recibir al Excelentísimo Señor Embajador Roberto Francisco Imendia, Embajador de la hermana República de El Salvador. El ha solicitado que se diera esta audiencia especial ante todo el Plenario, porque quiere agradecer todas las contribuciones que la hermana República nicaragüense ha hecho a la hermana República de El Salvador. Tiene la palabra el señor Embajador. EXCELENTISIMO SEÑOR EMBAJADOR DE LA REPÚBLICA DE EL SALVADOR, ROBERTO FRANCISCO IMENDIA. Muchísimas gracias. Honorable señor Presidente, Doctor Oscar Moncada Reyes; Honorables señores miembros de la Junta Directiva; Honorables señores Diputados; Honorables señoras Diputadas; Amigos todos: Me siento muy honrado y muy complacido de estar esta mañana aquí, entre ustedes, para darles a conocer brevemente la realidad salvadoreña, después de los devastadores terremotos acaecidos en El Salvador, que han dejado como ustedes saben, luto, dolor y destrucción a lo largo y ancho del país. Esta comparecencia ante ustedes obedece a una fina gestión del honorable Diputado, Reverendo Miguel Angel Casco, quien en compañía de dignos Representantes de este Poder del Estado se hicieron presentes la semana pasada en nuestra sede diplomática, para ser portadores de un significativo donativo de la Asamblea Nacional para los damnificados de El Salvador. Es oportuno el momento para agradecer este gesto solidario que hermana aún más a los pueblos de Nicaragua y El Salvador y sus instituciones. Hoy El Salvador padece los estragos de la peor tragedia en toda su historia; como ustedes bien lo saben, y también lo sintieron, dos terremotos sacudieron nuestros suelo con tan sólo treinta días de diferencia. El 13 de Enero y el 13 de Febrero son fechas macabras que difícilmente se borrarán de las mentes de los salvadoreños. Terremotos tan destructivos, como la bomba de Hiroshima, varias veces al mismo tiempo; terremoto de 7.6 grados en la escala de Richter, tan devastadores como decenas de furiosos huracanes haciendo estragos al mismo tiempo en Treinta y cinco segundos. Así se han catalogado estos eventos telúricos y sobre todo el primero, el del 13 de Enero que fue a nivel nacional, sentido en toda Centroamérica y parte de México. Mismo terremoto que ha sido clasificado por los geólogos en el vigésimo lugar de los sismos más destructivos del mundo en los últimos cien años, para un pequeño país que cabe seis veces en Nicaragua, de veintiún kilómetros cuadrados. Esto sí, señores, ha sido la peor tragedia de todos los tiempos En el Salvador, con las consecuencias y con lo que viene ahora en la reconstrucción. Datos oficiales dan cuenta de que los dos terremotos ocasionaron mil ciento cuarenta y tres personas fallecidas; también ocasionaron ocho mil quinientos diecinueve lesionados y dejaron un millón quinientos mil damnificados. En estas dos cifras yo quisiera detenerme brevemente: mil ciento cuarenta y tres fallecidos entre los dos terremotos, y gracias a Dios este evento telúrico o estos eventos se dieron por la mañana, el primero a las 11:35 a.m. de ese sábado 13 de Enero, y el segundo el 13 de Febrero a las 8:22 a.m. exactamente. Si esto hubiera sido de noche todavía estaríamos contando los muertos y los desaparecidos. Tenemos un millón quinientos mil damnificados, y jamás, jamás en la historia de El Salvador habíamos tenido producto de cualquier desastre natural, un millón y medio de damnificados. ¿Qué significa esto? Gente que lo perdió todo; gente que no tiene la seguridad que le da un techo, un techo digno; gente que está con su familia en un albergue. Conozco específicamente uno, porque personalmente fuimos a hacer una entrega de trescientos cincuenta toneladas recaudadas aquí, producto de la generosidad del pueblo nicaragüense, y me hice acompañar -y así quise hacerlo- por amigos nicaragüenses solidarios y por miembros de la Asociación de Salvadoreños Residentes. Eran cuarenta y cinco furgones, cuatro kilómetros ininterrumpidos de camiones, era algo espectacular: por donde pasábamos en El Salvador decían viva Nicaragua, gracias, hermana República de Nicaragua porque nos sentimos hermanos hoy más que nunca de ustedes, y esto lo tengo que decir aquí y lo hemos dicho miles de veces, El Salvador está muy agradecido por lo que ha hecho Nicaragua nuestra hermana, por nosotros. Pero estos damnificados, un millón y medio requieren de agua, de alimento, de medicina, de plástico negro, de alguna laminita de zinc; requieren de todo, esta gente no trabaja, esta gente está en los albergues. Y conocimos algunos albergues, como uno de ellos que me impresionó muchísimo, el albergue del Cafetalón, cerca de Santa Tecla, donde se desplomara la montaña de la Colonia Las Colinas y matara a más de seiscientas personas, están apiñados, duermen como pueden, tienen como techo el cielo y como lecho el suelo. ¿Cuánto tiempo estarán ahí? No sabemos. Necesitamos una gran ayuda, y necesitamos del esfuerzo de la comunidad internacional. En lo material, los terremotos destruyeron ciento treinta y tres mil trescientos ochenta y dos viviendas en cuestión de segundos, treinta y cinco segundos bastaron para cambiarle la fisonomía a El Salvador ciento cuarenta y cinco mil setecientos once viviendas se dañaron, mucha gente no quieren entrar a sus casas por temor a una réplica y que se le caiga, un ladrillo o una teja y mate a un familiar. Novecientos noventa edificios públicos fueron seriamente afectados, muchos de ellos van a ser demolidos porque ya han sobrevivido a dos terremotos. Cuatrocientos diecisiete iglesias sufrieron considerables daños en su infraestructura; también ciento veinte y cinco muelles, en su mayoría artesanales, se deterioraron y otros se perdieron; trece hospitales están prácticamente destruidos e igualmente veintiocho unidades de salud. Para atender a esos ocho mil heridos se necesitaron los hospitales, y los hospitales no funcionaron porque estaban prácticamente en el suelo; operaciones que se hacían en la calle, escenas impresionantes que todos nosotros pudimos ver a través de la televisión internacional. Pero ahí, estaba la mano nicaragüense; y dos o tres helicópteros de estos gigantes que tiene el Ejército trasladaron un hospital completo hacia la zona del desastre del segundo terremoto en San Vicente. Si no hubiera sido por esa ayuda tan arriesgada de los pilotos nicaragüenses- y de esos sí se mucho yo- esto no se hubiera podido realizar: salvar vidas, gente que quedó atrapada, gente que tuvo que ser amputada, gente que todavía está postrada en una cama, en la calle. Este es el daño real ocasionado por esos potentes terremotos. En lo económico se calculan pérdidas por el monto de los dos mil millones de dólares, eso equivale aproximadamente al 12 por ciento del Producto Interno Bruto de El Salvador. Cuarenta y tres mil pequeños y medianos empresarios lo perdieron todo, estamos hablando de farmacias, estamos hablando de pulperías, estamos hablando de zapaterías, estamos hablando de gente que trabaja esforzadamente y que va en el día a día. Estamos hablando de gente sencilla en El Salvador, el 70 por ciento de los empresarios son micro, pequeños y medianos, y de ellos cuarenta y tres mil, lo perdieron todo. Con el propósito de buscar ayuda, la semana pasada acudimos juntos a los demás países hermanos del área, a la cita con el Grupo Consultivo en Madrid. Allí, a El Salvador se le dio chance, se le dio oportunidad para exponer su caso y la respuesta de los organismos financieros internacionales fue inmediata, concediéndonos -como ustedes saben- mil trescientos millones de dólares para la reconstrucción, fondos que esperamos sean desembolsados lo más pronto posible y de manera constante. También El Salvador dijo en ese importante foro internacional, a través de nuestro Presidente, el Licenciado Francisco Flores, que la tragedia debe convertirse en una oportunidad para nuestro país y así desarrollar un modelo de sociedad más equitativo y una democracia más participativa. La misma tragedia nos da una enseñanza, El Salvador está en pie, a pesar de que está herido, pero está en pie y decidido a reconstruirse en todas sus dimensiones, gracias a esa solidaridad. Pero nosotros pensamos que el eje de la reconstrucción debe ser a través de la inversión internacional, de los inversionistas foráneos que vengan y no sólo inviertan en El Salvador, porque El Salvador es el que está sufriendo en este momento, tiene que ser en Nicaragua también, tiene que ser en Guatemala, en Costa Rica, en Honduras; tiene que ser en Centroamérica, y ahí estamos hablando de integración. Hoy más que nunca, honorables señores Diputados, consideramos que la integración debe darse, porque en la manera que El Salvador sufre esta consecuencia de los terremotos, en esa manera afecta también al área, y ustedes perfectamente lo saben. El Salvador está dejando de comprar productos y servicios; El Salvador está dejando de exportar por situaciones mismas del terremoto; entonces, se viene deprimiendo de alguna manera el comercio, aunque esperamos muy pronto estar resurgiendo. Pero esperamos también que esa solidaridad internacional, no sólo venga en las ayudas que se acaban rápidamente, sino en la inversión de largo plazo, para hacer el corredor logístico centroamericano, para decirle al mundo entero que somos importantes, Centro América es muy importante, somos el cruce mundial del comercio entre el nazta el TLC, Canadá, EEUU, México, el Mercosur, la Unión Europea, los países asiáticos. Somos el centro mundial en el comercio, y para eso necesitamos del concurso y de la inversión. Todos esos megaproyectos, se van a hacer si creen en nosotros, pero también si estamos unidos. Quiero aprovechar esta gran oportunidad para agradecer la generosidad del pueblo nicaragüense, agradecer la solidaridad del Gobierno, de los Poderes del Estado, entre ellos la Asamblea Nacional y los distintos organismos e instituciones públicas y privadas que desde el primer momento de la tragedia estuvieron con nosotros tendiéndonos su mano y compartiendo nuestra emergencia. Aprovecho de manera especial para agradecer al Ejército de Nicaragua, que puso a nuestra disposición sus mejores recursos para la crisis. Nuestro agradecimiento a Nicaragua será imperecedero. Nunca, nunca, nos olvidaremos que en los primeros días posteriores al primer terremoto la ayuda de Nicaragua era la tercera a nivel mundial. Hasta el momento se han enviado desde aquí, desde Nicaragua, más de mil toneladas en ayuda humanitaria a el Salvador, ayuda que todavía seguimos necesitando hermanos nicaragüenses, y se han recaudado gracias a ese gran corazón, a la generosidad, a ustedes nicaragüenses que comparten el dolor, y que saben del dolor porque han sufrido las mismas cosas que ha sufrido también el pueblo salvadoreño. Hemos logrado recaudar más de cien mil dólares en efectivo, que serán destinados a la reconstrucción de viviendas dignas para los más desposeídos de los salvadoreños. Por todo ese gesto solidario, hoy queremos decir desde esta augusta tribuna: gracias, generosa Nicaragua; Gracias, honorables Diputados. Buenos días. PRESIDENTE OSCAR MONCADA REYES: Vamos a continuar con la Agenda de hoy. Señor Secretario, por favor. SECRETARIO PEDRO JOAQUIN RIOS CASTELLON: En el Adéndum Nº 5, en la Orden del Día, comenzamos con el Punto Especial, 1.6, APROBACION DE RESOLUCION DE CONVOCATORIA PARA LA ELECCION DE UN MAGISTRADO DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA. SECRETARIO WALMARO GUTIERREZ MERCADO:
SECRETARIO PEDRO JOAQUIN RIOS CASTELLON: (21 de Marzo del año 2001). JOSE RENE ARAUZ LOPEZ BAYARDO ARCE CASTAÑO NELSON ARTOLA ESCOBAR ARNULFO CONSTANTINO BARRANTES MORAZAN MARIA LOURDES BOLAÑOS ORTEGA JAIME JOSE BONILLA LOPEZ JOSE ERNESTO BRAVO MORENO RAFAEL OMAR CABEZAS LACAYO ADOLFO CALERO PORTOCARRERO EDUARDO BERNARDO CALLEJAS DESHON ROGER CASTELLON ORUE ANGELES CASTELLON CASTRO FELIX HERNAN CASTILLO FLORES EDWIN CASTRO RIVERA NOEL JOSE DELGADO CUADRA ALVARO IVAN ESCOBAR FORNOS FRANCISCO DE PAULA ESPINOZA NAVAS JOSE MANUEL ESPINOZA CANTILLANO RITA DEL SOCORRO FLETES ZAMORA CARLOS ALBERTO FONSECA TERAN FRANCISCO HERIBERTO GADEA MANTILLA SERGIO DE JESUS GARCIA PINELL JOSE MERCEDES GONZALEZ PICADO MARIO JOSE GUTIERREZ VASCONCELOS MARIA HAYDEE OSUNA RUIZ SALVADOR HERNANDEZ GUILLEN FARNOR ANTONIO HERRERA PEREZ ARIEL LOPEZ LOPEZ EDUARDO JOSE LOPEZ MEZA AUGUSTO CESAR LOPEZ GONZALEZ EMILIO JOSE MARQUEZ ACUÑA FRANCISCO JOSE MARTINEZ LARIOS PEDRO PABLO MARTINEZ TELLEZ PEDRO ALEJANDRO MATUS GONZALEZ WILLIAM MEJIA FERRETI ENRIQUE MEMBREÑO ORTEGA JOSE DE JESUS MIRANDA HERNANDEZ VICTOR MANUEL MIRANDA VARGAS OSCAR MONCADA REYES CARLOS WILFREDO NAVARRO MOREIRA RAMON ELISEO NUÑEZ HERNANDEZ GUILLERMO ANTONIO OSORNO MOLINA LEONEL PANTIN WILSON NOEL ORLANDO PEREIRA MAJANO FRANCISCO JAVIER PEREZ ORTEGA GUILLERMO RAMON RAMIREZ CUADRA GUILLERMO VIRGILIO RAMOS DUARTE PEDRO JOAQUIN RIOS CASTELLON ANGELA DEL ROSARIO RIOS PEREZ ALBERTO FRANCISCO RIVERA MONZON EDUARDO JOSE RIZO LOPEZ MAXIMINO RODRIGUEZ MARTINEZ ANABEL ROMERO LOPEZ JOSE MARIA SANCHEZ SANTANA WILLIAM SCHWARTZ CUNNINGHAM NATHAN JORGE SEVILLA GOMEZ PABLO DEL SOCORRO SIERRA CHACON WINSTON SIMPSON GAYLE JOSE DAMICIS SIRIAS VARGAS VICTOR MANUEL TALAVERA HUETE VICTOR HUGO TINOCO FONSECA ISMAEL JOSE TORREZ CALERO LUIS ALBERTO URBINA NOGUERA HENRY URCUYO MALEAÑOS MARTHA HERIBERTA VALLE VALLE DAMASO VARGAS LOAISIGA LEONIDAS ZUNIGA MOLINA Constatación del quórum: 67 Diputados presentes. Hay quórum legal. PRESIDENTE OSCAR MONCADA REYES: Se abre la sesión. SECRETARIO PEDRO JOAQUIN RIOS CASTELLON: Vamos a continuar en el Adendum No. 6, con la ley que iniciamos el día de ayer: LEY ORGANICA DE LA SUPERINTENDENCIA DE PENSIONES. Seguimos en el artículo 23 del Capítulo V.